Malaquita

Los nombres de azurita y malaquita, de idéntica composición química, aluden precisamente al color de cada una de ellas, ambos debidos al cobre. La malaquita, con una molécula más hidratada, es la más estable y de mayor importancia, presentándose en formas arriñonadas o arracimadas con sus características formas bandeadas.

Su agradable aspecto hace que se hubiese utilizado como piedra decorativa desde la antigüedad, sobre todo donde existían yacimientos, como Rusia, en cuyos palacios zaristas no falta nunca.

En ocasiones se presentan juntas azurita y malaquita en crecimientos contínuos de gran belleza, que reciben el nombre deazurmalaquita. A veces también se encuentran crecimientos de azurita y cuprita, a los que se denomina burnita. También se la puede encontrar con cobre nativo o con crisocola y turquesa (Piedra de Eilat).

Es una piedra sensible a la temperatura, los ácidos, álcalis, etc. sobre todo en caliente, por lo que, junto a su escasa dureza, debe tenerse presente para su adecuado cuidado.

Habitualmente se talla en cabujón para broches, sortijas, collares, aunque también se utiliza para esculpir pequeñas figuras de arte industrial como ceniceros, cajitas, bandejas, etc.

Los yacimientos más conocidos, aparte del ya citado de Rusia (Urales) del que se han extraído bloques de hasta 50 Tm, posiblemente el de mayor importancia actualmente sea el Katanga en Zaire, obteniéndose también en Australia, Namibia y USA.

No es fácil confundir la malaquita con otras piedras, ya que ninguna otra piedra preciosa opaca, con bandas naturales o a base de tinciones consigue la delicadeza de su bandeado. Únicamente la pseudomalaquita un fosfato de cobre puede inducir a algún tipo de confusión.